Jugando despertamos en los niños el interés por la curiosidad de aprender..
Jugando somos ejemplo a seguir, por este motivo debemos promover el juego limpio..
Jugando impartimos justicia con reglas cooperativas ideadas por todos, el romper y no respetarlas crea desconfianza y se genera un clima de daño y miedo ya que no es justo, siempre claro el juego y la acción reflexiva..
Jugar genera contacto, un abrazo, un beso, caricias, se expresan sentimientos de armonía, comodidad y pertenencia al grupo, los corazones expresan un sentimiento de alegría y espontaneidad síntoma de un buen trabajo..
Un juego revela al niñ@ y al coordinador su verdadera personalidad y entrega, no existe la falsedad solo la realidad individual entregada al otro durante una acción lúdica.
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