Así como los niños juegan con celulares, MP4, cámaras digitales y computadoras portátiles, cada vez más adultos compran juguetes para darse un gustito: armar la pista Xcalectric que siempre quisieron tener, completar la colección de Rasti, vestir a las Barbies como verdaderas top models. Los especialistas en marketing los llaman kidults, y son como el sueño del pibe para cualquier empresa, ya que combinan la impulsividad de los chicos con la billetera de los mayores.
El mercado de juguetes para adultos crece cada vez más, y algunas jugueterías le dedican góndolas especiales. Gran parte de los usuarios de juegos de modelismo y para armar son mayores, y en el segmento de videojuegos, la edad promedio de los jugadores está en los 35 años (y no en los 15, como acusan muchos padres de adolescentes).
Los pioneros del fenómeno kidult son los exponentes de la llamada "Generación X" (o cuarenteens). Los nacidos entre el 65 y el 75 "fueron los primeros en sufrir los divorcios, las familias monoparentales o ensambladas, con padres que trabajaban muchas más horas de las que podían acompañarlos en casa. Crecieron con la violencia de la televisión y de la calle, el sida, el desempleo, la decadencia de los valores tradicionales y el terrorismo", señala un trabajo de la consultora especializada en consumo CCR. La generación que le sigue, los jóvenes "Y" (hoy entre los 25 y 35 años), son esencialmente lúdicos y promueven la diversión en sus lugares de trabajo. No se trata, en ninguno de los dos casos, de gente "que no tuvo infancia", sino de adultos que buscan la diversión y disfrutar el presente, como cuando eran chicos. Por eso, aunque son perfectamente racionales cuando se trata de adquirir artículos de primera necesidad, no reparan en gastos y hasta pueden incurrir en un préstamo personal para comprarse el último chiche tecnológico o una consola wii.
El mercado de juguetes para adultos crece cada vez más, y algunas jugueterías le dedican góndolas especiales. Gran parte de los usuarios de juegos de modelismo y para armar son mayores, y en el segmento de videojuegos, la edad promedio de los jugadores está en los 35 años (y no en los 15, como acusan muchos padres de adolescentes).
Los pioneros del fenómeno kidult son los exponentes de la llamada "Generación X" (o cuarenteens). Los nacidos entre el 65 y el 75 "fueron los primeros en sufrir los divorcios, las familias monoparentales o ensambladas, con padres que trabajaban muchas más horas de las que podían acompañarlos en casa. Crecieron con la violencia de la televisión y de la calle, el sida, el desempleo, la decadencia de los valores tradicionales y el terrorismo", señala un trabajo de la consultora especializada en consumo CCR. La generación que le sigue, los jóvenes "Y" (hoy entre los 25 y 35 años), son esencialmente lúdicos y promueven la diversión en sus lugares de trabajo. No se trata, en ninguno de los dos casos, de gente "que no tuvo infancia", sino de adultos que buscan la diversión y disfrutar el presente, como cuando eran chicos. Por eso, aunque son perfectamente racionales cuando se trata de adquirir artículos de primera necesidad, no reparan en gastos y hasta pueden incurrir en un préstamo personal para comprarse el último chiche tecnológico o una consola wii.
7 razones para hacerlo
1 Es una manifestación de la libertad. Jugar es una actividad libre, no impuesta; por eso, generalmente se juega en tiempo de ocio.
2 Alivia el estrés: nos permite abstraernos de las exigencias de la vida corriente, reducir tensiones y generar endorfinas, u hormonas de la felicidad.
3 Es una forma de diálogo directa y amena con nuestros hijos. Nos permite compartir con ellos códigos y emociones, y transmitirles enseñanzas para el futuro.
4 Favorece el aprendizaje, dado que permite simular situaciones e interactuar. Aquello que se aprende "haciendo" no se olvida jamás.
5 Es un vehículo de socialización: jugando se conocen y se hacen amigos, en cualquier etapa de la vida.
6 Implica un esfuerzo físico y/o intelectual que contribuye a mantener el cuerpo y la mente en forma.
7 Enseña actitudes de convivencia, como competir, perder y ganar.
Juegos según la edad Desde el nacimiento hasta los 6 meses
Se le pueden alcanzar, esconder y mostrar juguetes relacionados con lo sensorial: de colores llamativos, tamaño adecuado, no tóxicos y fabricados con materiales resistentes, ya que tienden a llevárselos a la boca y arrojarlos al piso.
Se recomiendan sonajeros, peluches con sonido, móviles de cuna, mordedores, muñecos de goma.
De los 6 a los 12 meses
El niño comienza a sentarse, a gatear e incluso a caminar. Para acompañarlo en estas "aventuras", se puede jugar con pelotas blandas, sonoras o luminosas, andadores, juguetes a cuerda que se desplazan, de plástico para la hora del baño, muñecos de trapo y encajables grandes: cubos o vasos de plástico de distintos tamaños que se pueden apilar.
De los 12 meses a los 2 años
Les encanta que les lean libros, y los juguetes con sonido y movimiento. Se puede jugar con pelotas, platos y cucharas de plástico, autitos y libros de imágenes y texturas en cartón duro o tejidos plastificados.
De los 2 a los 4 años
Empiezan a construir; pueden armar rompecabezas de piezas grandes, dibujar y hacer formas con plastilina de colores. Les gusta adoptar roles de la vida cotidiana: jugar al cocinero, al doctor, a la mamá o a la maestra. Los juguetes más adecuados para esta edad son autitos, muñecos, utensilios de distintos oficios, disfraces, libros sencillos para colorear, juguetes para hacer burbujas y dominó de colores y formas.
Para los 4 y los 5 años
Les encanta representar roles como el del papá o la mamá. Los juegos indicados suelen ser los de dramatización. Los juguetes más adecuados para esta edad son los disfraces, pinturas de maquillaje, pizarra, libros para colorear y de pegatinas, títeres, juegos de cocina y de té, juegos de organizar (pueblos, garajes, ciudades, granjas), juegos de memoria visual.
Para los 5 y los 6 años
Empiezan a desarrollar más sus habilidades psicomotoras. Se inclinarán por triciclos, bicicletas y accesorios deportivos (pelotas, raquetas, soga para saltar), cochecitos a control remoto, trenes, libros de actividades infantiles, muñecos articulados, cajas organizadoras con compartimientos para guardar sus juguetes, libros de historias cortas e ilustradas, dominó de imágenes, números y asociaciones.
Para los 7 y 8 años
Les encanta construir, inventar aparatos, coleccionar cosas. Se puede jugar a los naipes, al dominó, hacer actividades al aire libre (fútbol, patín), organizar juegos de preguntas y respuestas, de memoria, de experimentos; leer con ellos libros y revistas adecuados a su edad.
Para los 9 y 10 años
Les interesa el juego organizado y de competencias. Disfrutan de los juegos de mesa y de experimento, de los deportes y los libros de aventuras. También, construir y remontar barriletes, la iniciación en el modelismo (aviones, barcos, casitas de muñecas), coleccionar figuritas o monedas y tocar instrumentos musicales, que pueden ser el inicio de una actividad que dure toda la vida.
Para los 11 y 12 años
Les gustan los juegos de ingenio y de estrategia para jugar con sus compañeros o con adultos (TEG, Scrabble, El Juego de la Vida, El Estanciero); también, los juegos tecnológicos y los rompecabezas y encastres de muchas piezas y posibilidades constructivas.
Más de 12 años
Disfrutan los juegos en equipo, los deportes y los juegos de experimentación.
Todo aquello que fomente sus aficiones (libros, música, videojuegos).
Asesoramiento: Lic. Mónica Cruppi, APA
Guía para entretenerse Juegos de rol
www.queeselrol.com
Talleres de juego y creatividad del Estudio Inés Moreno
www.inesmoreno.com.ar
Taquion, juegos para el desarrollo personal
www.taquion.com.ar
Cofradía del TEG
http://cofradiadeteg2010.wordpress.com/
Club del Rasti
http://www.rastitv.blogspot.com
Fuente: http://ucce.ucdavis.edu
www.queeselrol.com
Talleres de juego y creatividad del Estudio Inés Moreno
www.inesmoreno.com.ar
Taquion, juegos para el desarrollo personal
www.taquion.com.ar
Cofradía del TEG
http://cofradiadeteg2010.wordpress.com/
Club del Rasti
http://www.rastitv.blogspot.com
Fuente: http://ucce.ucdavis.edu
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